Para los pacientes con TNFs, que además tienen otros síntomas fuera de los puramente neurológicos, puede ser desconcertante el recibir muchos diagnósticos diferentes por parte de diferentes especialistas.
Es habitual encontrar un paciente que tiene un TNF (por ejemplo, debilidad funcional o crisis), pero que además tiene otros diagnósticos como fibromialgia (dolor corporal generalizado) o síndrome de intestino irritable.
Los síntomas principales de los TNFs son los que tenemos explicados en el apartado de Síntomas >> Síntomas de los TNFs. Pero síntomas distintos a los neurológicos, como el dolor, la fatiga o problemas intestinales no son estrictamente considerados neurológicos y por tanto no están dentro de los TNFs. Los consideramos síntomas funcionales de otros sistemas y los médicos tienden a llamarlos de muchas formas.
Aquí enumeramos los trastornos funcionales más comunes:
Pero sin embargo, tienen mecanismos en común con los TNFs. Todos estos trastornos funcionales tienen en común que se deben a una mal funcionamiento del cerebro al controlar dichos sistemas y la persona pierde el control voluntario sobre dichos síntomas.
Muchos pacientes con estos trastornos funcionales reconocen que están relacionados, puesto que cuando empeoran de un síntoma, los otros síntomas también pueden empeorar.
Entonces, ¿cómo se relacionan los TNFs con otros trastornos funcionales? Pues porque son entidades que se solapan mucho entre sí. Podemos ver a las personas con “Trastornos Funcionales” como una única condición con diferentes manifestaciones, entre las cuales los TNFs son una de ellas.
El diagnóstico de un TNFs puede producir diferentes sensaciones y respuestas. Por ejemplo, algunas personas encuentran “alivio por fin”, al encontrar una respuesta y explicación a sus síntomas, al saber que otras personas también lo padecen y que son síntomas REALES.
Pero en otros pacientes que ya han recibido muchos otros diagnósticos como fibromialgia, puede aparecer un sentimiento de “No, otra cosa mas que echarme a la espalda”… Por eso, es tan importante entender que NO son muchos diagnósticos diferentes y peregrinos, sino que se puede entender como una condición que tiene diferentes manifestaciones.
Conforme vamos entendiendo mejor los mecanismos de los trastornos funcionales, la ciencia está descubriendo que este solapamiento es muy grande. Así, en la fibromialgia se observan alteraciones en el procesamiento del dolor a nivel cerebral, que son similares a los cambios que reflejan un mal funcionamiento cerebral que se ven en pacientes con TNF y con intestino irritable. Además también hay solapamiento en los tratamientos, por ejemplo, las terapias físicas o psicológicas de rehabilitación tienen muchos aspectos en común, así como ciertas medicaciones que se utilizan para tratar dichos síntomas.
Al final, cada individuo es un poco diferente, con diferentes solapamientos de síntomas y trastornos funcionales, pero dentro de un espectro de la misma entidad y mismos mecanismos.
Para algunas personas, poder entender que tienen cierta vulnerabilidad a padecer trastornos funcionales en general, entre los cuales se puede encontrar el TNF, puede tener más sentido que tener múltiples enfermedades en múltiples sistemas.
Y aunque pueda sonar exasperante darse cuenta que las manifestaciones de un mismo problema van y vienen o recurren, en cierta manera no es diferente a tener otras condiciones crónicas como el asma o diabetes, donde los pacientes aprenden a conocerlo y a manejarlo.
Esto también es un mensaje de esperanza. Si has tenido un trastorno funcional en el pasado del que has mejorado, ya te has enfrentado a este problema y tienes herramientas para afrontarlo. ¿Hay algún aprendizaje previo, que te permita combatir este nuevo trastorno funcional?
Aquí ponemos algunos ejemplos:
Ejemplo 1. Esta persona tienen un solapamiento de TNF (debilidad funcional en la pierna), dolor crónico e intestino irritable, a intensidades iguales.
Ejemplo 2. Esta persona tiene como problema principal el dolor crónico/fibromialgia. Pero también puede tener la pierna algo débil en ocasiones y algún problema leve digestivo. Hay un solapamiento similar al caso anterior, pero hay un síntoma principal dominante.
Ejemplo 3. Esta persona tiene múltiples síntomas funcionales. Te impresionará ver la migraña aquí. De hecho, a algunos médicos les puede parecer hasta controvertido, pero la migraña también se relaciona con el funcionamiento del cerebro. Es muy frecuente tener migraña y trastornos funcionales. Algunos médicos creemos que la migraña entraría dentro del espectro de trastornos de la función del cerebro.
Trastornos psicológicos como la ansiedad o depresión son comunes en los TNFs, como también lo son en casi todas las enfermedades neurológicas, como en epilepsia o esclerosis múltiple.
La ansiedad y depresión se definen por síntomas psicológicos (ánimo bajo persistente, melancolía, incapadidad para disfrutar etc.) pero también por los síntomas físicos (fatiga, trastorno del sueño, etc.) que se ven en los trastornos funcionales.
No tienes por qué tener un trastorno psicológico para desarrollar un TNF (omo ya hemos repetido muchas veces) pero en el caso de que lo tengas, puede ser útil entender cómo se solapa y se relaciona con el TNF:
Ejemplo 4. Mareo PPPD, disociación y ansiedad. Cada persona es única y diferente. Estea persona tiene una mezcla de PPPD, disociación y ansiedad a partes iguales. Puedes tener un mareo PPPD sin tener síntomas disociativos ni ansiedad, pero normalmente suelen coexistir.
Ejemplo 5. Crisis funcionales. Esta persona tiene crisis disociativas pero también tiene dolor pélvico crónico y su Ginecólogo opina que está relacionado con un trastorno funcional. También tiene un trastorno de estrés postraumático, que en este caso es muy relevante e interactúa fuertemente con los síntomas de dolor y las crisis.
Tener otra enfermedad neurológica o médica es uno de los factores de riesgo más frecuentes en los TNFs. Lo discutimos mejor en esta página. Pero a parte de enfermedades neurológicas, también puede haber otras enfermedades médicas no neurológicas que se solapen con síntomas funcionales. Por ejemplo, padecer de artritis o artrosis puede causa algo de dolor, y que éste dolor sea más intenso si tengo fibromialgia y también aumente en el caso de depresión.
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