Temblor / Espasmos / Problemas al Caminar y otros Trastornos Funcionales del Movimiento

¿Qué son los trastornos funcionales del movimiento?

Un trastorno del movimiento funcional significa que hay un movimiento o postura anormal de una parte del cuerpo debido a que el sistema nervioso no funciona correctamente (pero no a causa de una enfermedad neurológica estructural o degenerativa subyacente).

Puede leer más sobre cada uno de estos síntomas en su propia página (Temblor funcional, distonía funcional, sacudidas/mioclonías funcionales, trastorno de la marcha funcional, tics funcionales, etc.). Algunas personas sólo tienen un tipo de trastorno del movimiento y otras tienen varios. Lo más frecuente es que se combinen varios de estos trastornos, pero trastorno del movimiento funcional más frecuente es el temblor.

Los pacientes con un trastorno del movimiento funcional pueden experimentar diversos síntomas:

• Temblor: cuando un brazo o una pierna tiemblan de forma incontrolada. El temblor funcional suele ser bastante variable. Incluso puede desaparecer cuando uno está distraído, pero en general puede ser muy incapacitante.
• Sacudidas (mioclonías): algunas personas experimentan movimientos espasmódicos. Esto puede ser particularmente en respuesta a ruidos fuertes, ciertos tipos de iluminación o ráfagas de dolor.
• Espasmos / contracturas / distonía: algunas personas desarrollan posturas anormales en manos o pies que son difíciles de corregir. Puede tratarse de un problema temporal intermitente (un espasmo o calambre) o puede ser más crónico (suele denominarse distonía o contractura fija / funcional). Los pacientes con distonía funcional suelen tener la mano apretada o el pie torcido hacia adentro.
• Problemas de la marcha: El más común es la marcha “arrastrada” que se observa en pacientes con debilidad funcional de una pierna (dejan la pierna “como olvidada” por detrás). Otros tipos de marcha incluyen una marcha generalmente inestable, a menudo asociada a una historia de caídas previas y un mayor temor a futuras caídas.

A diferencia de otros trastornos del movimiento (por ejemplo, la enfermedad de Parkinson), un trastorno funcional del movimiento no está causado por un daño estructural o enfermedad degenerativa del sistema nervioso. Sino que se debe a un problema reversible en el funcionamiento del sistema nervioso. Esto significa que un trastorno del movimiento funcional puede mejorar e incluso desaparecer por completo.

¿Cómo se diagnostica?

El diagnóstico de un trastorno del movimiento funcionalsuele realizarlo un neurólogo. Puede ser un diagnóstico especialmente difícil porque requiere un conocimiento experto de toda la gama de trastornos del movimiento debidos a diferentes enfermedades neurológicas, muchas de los cuales pueden ser inusuales. Por lo tanto, es difícil resumir todas las características clínicas de todos los trastornos funcionales del movimiento y se debatirán en su apartado específico. Aquí algunos ejemplos

• Temblor: un temblor funcional se caracteriza por:
  • Temblor que desaparece transitoriamente o que cambia de ritmo al copiar movimientos con el brazo o la pierna buenos. Esto se denomina “prueba de acompasamiento o arrastre”.
  • Dificultad para realizar movimientos rítmicos con la mano (o pierna) buena.
  • Momentos en los que el temblor está ausente (normalmente con la distracción).
  • Frecuencia variable (velocidad variable según el momento)
  • Temblor que empeora mucho cuando alguien intenta controlarlo o mantener quieto el brazo o la pierna.
• Sacudidas: se denomina mioclonías. La mioclonía funcional se caracteriza por:
  • Sacudidas en respuesta a sonidos o ruidos fuertes (aunque existen otras causas que también provocan esto).
  • En el registro EEG: Presencia de una onda cerebral especial llamada “Bereitschaftpotential” que no suele estar presente en pacientes con mioclonía causada por una enfermedad neurológica.
• Fasciculaciones benignas. La mayoría de la gente tiene pequeños movimientos de vez en cuando, sobre todo alrededor del ojo, en los dedos y en las pantorrillas. Estas fasciculaciones son tan frecuentes que es normal experimentarlas de vez en cuando. Sin embargo, algunas personas experimentan cada vez más fasciculaciones musculares, hasta que aparecen en varias partes del cuerpo durante la mayor parte del tiempo. Esto puede provocar una ansiedad comprensible sobre la causa de estos síntomas, lo que a su vez empeora aún más las fasciculaciones. Se sabe que este tipo de fasciculaciones benignas generalizadas son más frecuentes en estudiantes de medicina y médicos que, al desarrollar estos síntomas, temen padecer una enfermedad motora (conocida como ELA). Existen otras causas de fasciculaciones musculares generalizadas, pero la fasciculación benigna sigue siendo la más frecuente desde el punto de vista clínico.
• Espasmos. Los espasmos funcionales se denominan “distonías”. Suelen producirse en la mano y las muñecas. La mano puede sufrir lo que se denomina “espasmo carpopedal”. Esto también ocurre con otras afecciones médicas, como tener un nivel bajo de calcio en sangre, y el médico debe tenerlas en cuenta antes de decidir que son “funcionales”. El espasmo carpopedal es especialmente probable que se produzca durante la hiperventilación.
• Postura fija (“distonía fija”). Describe una posición, normalmente de la mano o los pies, que permanece fija durante todo o la mayor parte del tiempo. Las posturas fijas de este tipo suelen ir asociadas a cierta debilidad funcional de la extremidad y suelen ir acompañadas de dolor. Existe un solapamiento en este caso con un trastorno denominado Síndrome de Dolor Regional Complejo. Los dos tipos más comunes son:
  • En la mano: donde las apariencias pueden ser similares al espasmo carpopedal o a veces con una mano que está “apretada”.
  • En el pie: donde el tobillo suele girarse hacia dentro.
• Trastorno funcional de la marcha. Existen varios tipos de trastorno funcional de la marcha. Describe la dificultad para caminar (una marcha anormal) que no se debe a una enfermedad neurológica subyacente. Se han descrito distintos tipos, entre ellos:
  • Lentitud excesiva: marcha muy lenta con tendencia a que los pies se peguen al suelo.
  • Patrón de “caminar sobre hielo”: marcha cautelosa con los pies muy separados y las piernas muy rígidas.
  • Agachado. Marcha en la que la persona parece estar agachada. A menudo se asocia al miedo a caerse.
  • Flexión repentina de las rodillas. Suele asociarse a un hallazgo de debilidad funcional en las piernas. A veces, este problema se denomina “ataques de caída brusca“, aunque es importante reconocer que puede deberse a otras causas, como problemas de rodilla.
  • Marcha inestable. Marcha generalmente inestable con pasos laterales repentinos.

¿Cómo se producen los trastornos funcionales del movimiento?

Los trastornos funcionales del movimiento surgen por diferentes razones en diferentes personas. Algunos de los factores precipitantes aparentes son similares a los descritos especialmente para la debilidad funcional de las extremidades. Para más información, también ver ¿cómo aparecen? y ¿por qué aparecen?