La respuesta a esta pregunta depende de los datos que se analicen. Como éste ha sido un tema que ha dado lugar a confusión, a continuación exponemos algunos de los estudios. Sentimos que sea un poco técnico. La conclusión es que los TNF suponen una de las enfermedades más comunes en neurología. No obstante, no se diagnostican como tal y muchas más personas padecen sintomas funcionales de lo que la mayoría de la gente cree.

Los síntomas funcionales es una de las razones más frecuentes para acudir al neurólogo.

• Un estudio de 884 nuevos pacientes ambulatorios en Australia encontró que el 15% tenía un diagnóstico de TNF, que fue el tercer diagnóstico más común (Ahmad y Ahmad, 2016).
• Un estudio de 577 nuevos pacientes ambulatorios en clínicas de neurología en Aberdeen, Reino Unido, encontró que el 15% tenía síntomas funcionales, lo que lo convierte en la segunda razón más común para una cita después del dolor de cabeza / migraña (Watila et al., 2022).
• En otro estudio más antiguo de 3.781 nuevas consultas en toda Escocia, 209 pacientes presentaban un trastorno funcional claro y otros 200 tenían diagnósticos inespecíficos como mareos y síntomas cognitivos, que también podrían incluirse ahora en el trastorno neurológico funcional (Stone et al., 2009). Otros pacientes presentaban diagnósticos como migraña, pero los neurólogos pensaban que el problema principal era un trastorno funcional asociado. Así pues, podría decirse que entre el 6 y el 16% de los pacientes que acuden a consultas de neurología padecen un trastorno funcional, dependiendo de cómo se defina. El límite superior de esta estimación lo convertiría en el segundo motivo más frecuente de consulta al neurólogo. Desde aquel estudio (realizado entre 2002 y 2004), el reconocimiento clínico de los trastornos funcionales ha mejorado.
• Un estudio neozelandés halló que el 9% de todos los pacientes ingresados en una planta de neurología presentaban un TNF (Beharry et al., 2021). Otros estudios de Oxford (7%) (Parry et al., 2006) y Berlín (9%) encontraron cifras similares.

En el ámbito de la medicina de urgencias, la DGF también es frecuente.

• Un estudio de personas con una primera convulsión en un servicio de urgencias australiano descubrió que alrededor de una cuarta parte de las personas que se creía que tenían convulsiones epilépticas, en realidad tenían convulsiones funcionales (convulsiones relacionadas con TNF) (Lehn et al., 2021).
• En el mismo estudio se descubrió que hasta el 50% de las personas con crisis epilépticas muy prolongadas tenían TNF (Lehn et al., 2021).
• Un estudio de unidades de ictus en Londres descubrió que alrededor del 8% tenía un TNF, y no un ictus (Gargalas et al., 2017).

¿Cuántas personas en EE. UU. o el Reino Unido padecen FND?

Esta es una pregunta difícil de responder con precisión, pero se puede hacer una estimación observando los dos tipos más comunes de TNF, las convulsiones funcionales y los trastornos funcionales del movimiento (incluida la debilidad de las extremidades y las presentaciones que se asemejan a los ictus). Si las mejores estimaciones de estas afecciones (Duncan et al., 2011) (Villagrán et al., 2021) se combinan con estudios de niños y jóvenes (Hansen et al., 2020) (que no aparecen en los mismos estudios), junto con estudios que nos indican durante cuánto tiempo, por término medio, las personas tienen síntomas de TNF, entonces llegamos a una cifra de entre 250.000-500.000 en EE.UU. y alrededor de 50-100.000 en el Reino Unido. La cifra real puede ser menor, pero también podría ser mucho mayor.

Otro estudio reciente de medicina general (médicos de familia) que abarca al 72% de la población de Escocia reveló que se había diagnosticado un TNF a 8040 personas. Esto equivaldría a 11.150 personas en Escocia y a unas 140.000 personas en el Reino Unido.

La mayoría de los neurólogos reconocen que la TNF está infravalorada en los servicios clínicos, ya que suele estar mal codificada por los sistemas de administración hospitalaria. En algunas partes del mundo, los neurólogos no reciben pago si utilizan los códigos existentes para TNF, lo que reduce las estimaciones (Stone et al., 2014). Se agradecerían mejores estudios para tener una idea más precisa de las cifras exactas, pero lo que está claro que es un problema común.

En EE. UU., un estudio sobre los costes de los TNF demostró que esta enfermedad consumía más de mil millones de dólares al año en costes de hospitalización, una cifra similar a la de la enfermedad de la motoneurona/esclerosis lateral amiotrófica (Stephen et al., 2021).